Lulú, dícese de esa mujer pizpereta, traviesa, alegre, amiga, amante…, dispuesta a darlo todo a cambio de un mínimo que sólo depende de ti si es mucho. Le gusta seducir con sus palabras, darte un trozo de su corazón en cada letra. No busca nada más que ser feliz, sola o en compañía. Los miedos se los merienda cada tarde con sus hijos en un parque al salir de la escuela. No busca depender de nadie ni que de ella dependan. Busca paz, tranquilidad pero con un toque de locura, la suficiente para que no dejen de volar sus mariposas que moviendo sus alas le dan energía a sus ilusiones, esas que cada día o se fortalecen o se van para dejar paso a otras de mejores. LuLú, en todo su esplendor es bondadosa, escucha, atiende y aunque no te de consejos te explica lo que le haces sentir e intenta ahuyentar tus miedos. Le encanta susurrarte al oído cuando te quiere si lo siente. Cuando se enamora pierde el norte y eso le entristece. Para en seco, respira hondo y vuelve a sus inicios, pero