Personas que no miran más allá pueden llegar a etiquetar a una persona por lo que lleva puesto. No necesitan esforzarse en descubrir algún detalle que les lleve información equivocada a sus cerebros. Admiro a las personas que crean su propio estilo. Llevar un traje bien puesto a la mayoría le sienta bien, pero llevarlo con unas bambas de marca y un pelo despeinado no lo puede hacer todo el mundo. Un vestido de seda rojo por encima de las rodillas no a todo el mundo le sienta bien con unas botas camperas. La personalidad de cada uno es lo que marca nuestro estilo. Por llevar unos tejanos desgastados y unas bambas de punta de goma algo sucias (que la goma brille tampoco)no me hace poco aseada. Me gusta sentirme libre con lo que llevo puesto pues ahí nadie me puede mandar. Mis tejanos y mis deportivas hemos compartido muchas historias. Ellas saben tanto como yo que el camino está repleto de piedras y obstáculos. Las enfermedades y desgracias nunca han venido solas, pero haciendo una bu